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Dia 4. Huesca a Anzánigo
DISTANCIA:67 km TIEMPO TOTAL 10 H DESNIVEL + Acumulado 1168 m
Después de una cómoda noche, salimos de Huesca tempranito, a las 6:30 h, antes desayunamos en un bar próximo al hotel, el único que había abierto en la zona a estas horas. La verdad es que la atención que recibimos por parte de la persona que había en la barra, dejó mucho que desear. No se si habría pasado mala noche, estaría cabreada con el marido o tendría sueño, la verdad es que ser atendido de esta manera te da una alegría para el cuerpo que no veas.
Nos despedimos por educación y salimos pedaleando con la intención en no no parar nunca mas en el Bar Brasil del Coso Alto... y señora si no le gusta su trabajo, hágaselo mirar o cambie de ocupación.
Salimos de Huesca con dirección a Chimillas, la ruta va paralela al rio Isuela para luego coger una pista que nos conducirá hacia la Alberca de Cortés muy cercana a esta población. La temperatura es fresca y se agradece.
Cruzamos Chimillas cuando empieza a verse algo de movimiento . Es un pueblecito dormitorio de Huesca, plagado de adosados y chalecitos, a esta hora la gente se desplaza para ir a trabajar.
Seguimos la ruta y dejamos Banastás a nuestra derecha para meternos en un bosquecito donde la pista se convierte en un senderito fácil y bonito rodeado de vegetación.
Una vez atravesado, nos encontramos con el Catillo de Castejón y poco después con el de Anzano.
Ya se divisa Bolea en la lejanía, una larga planicie de campos de cereal nos separa del cerro donde se alza esta población. El calor ya empieza a apretar y un rebaño de ovejas rompe el paisaje y el silencio de estos lares, son las 9:00 h de la mañana.
Aprovechamos para refrescarnos en una fuente y Eli entabla conversación con una vecina, un poco mas allá un grupo de jubilados almuerza y nos invita a un trago de su bota de vino. Con la calor que hace y lo que nos queda, amablemente declino el ofrecimiento y charlamos un momento con ellos.
Cuando oyen decir de donde venimos y a donde vamos, se echan mano a la cabeza y hacen gestos de " están locos estos romanos..."
Proseguimos viaje hacia Aniés, son las 10:00 h de la mañana y el pueblecito está desierto, buscamos la fuente, nos refrescamos, cargamos agua y cogemos pista hacia Loarre.
Busco una variante y esta me conduce hacia la población por una buena pista y la carretera que sube al Castillo.
El Castillo de Loarre es una construcción magnifica, muy bien conservada y se distingue de bien lejos en cualquier punto de la zona, merece la pena ser visitado. Ya tuvimos ocasión d verlo de cerca cunado hicimos la ruta del Reino de los Mallos hace un par de años.
En la plaza del pueblo hacemos una parada para comer algo y recargar las baterías, ahora nos queda la parte mas dura. Una larga ascensión hacia el Mirador de los Buitres y la Collada de San Román , antes de cambiar de comarca y de valle.
Charlamos con un chileno que esta haciendo cicloturismo desde Barcelona y no sabe bien a donde se dirige...será la única persona que nos encontraremos con alforjas durante todo el viaje.
Reconfortados después de esta parada cogemos camino hacia Sarsamarcuello. Cuando hice el track del recorrido había una zona que no estaba clara, un barranco donde presumiblemente tendríamos que bajar de la bici e ir a pié. Pero cuando nos encontramos en medio del fregado fue peor de lo que habíamos imaginado. Un barrancote lleno de piedras y vegetación y una larga subida por su cauce en busca de la pista que teníamos metros por encima, nos hizo sudar de lo lindo empujando la bicicletas. Cuando llegamos a Sarsamarcuello buscamos desesperadamente la fuente para reponernos y descansar un rato.
Bueno ahora nos queda la parte mas dura de la ascensión, una larga pista con muchas revueltas que nos conducirá hacia el Castillo de Sarsanarcuello y el Mirador de los Buitres. Por suerte la pista está en buen estado los que nos permite alcanzar la parte alta sin mucho esfuerzo.
El reloj marca la 13:15 horas cuando alcanzamos la parte alta del recorrido, la vista se nos abre hacia la Hoya de Huesca que tenemos a nuestros pies y a lo lejos podemos ver todo el camino que llevamos hecho en el día.
Hacemos una breve parada a la sombra de las ruinas de la Ermita de San Miguel,antes de emprender el ultimo largo repecho hasta el Mirador de los Buitres, punto mas alto del día de hoy.
Una larga diagonal con fuerte pendiente nos lleva hasta la parte alta de la zona de los Miradores y en su extremo norte está el de los Buitres. Un lugar donde hay un puesto de observación para estas aves y lugar donde finaliza la vía ferrata del Cubilillo de Riglos.
Las vistas son magnificas, tenemos a nuestro pies los Mallos de Riglos, a lo lejos los de Agüero, el rio Gállego discurre cercano y si hubiera buena visibilidad se vería hasta el Moncayo.En este lugar que siempre está muy concurrido ...no encontramos a nadie. El Mirador para nosotros!!!
Unas fotos de rigor y comemos algo. Este lugar bien merece un descanso.
Deshacemos el recorrido hacia el desvío del Mirador y seguimos subiendo hacia la Collada de San Román a la que llegamos sin contratiempos a las 14:00 h . A esta hora el sol aprieta con justicia y nos disponemos a realizar la ultima parte del recorrido. Una larga bajada por una pista en no muy buenas condiciones que nos llevará hasta la Peña, ya muy cerca de nuestro destino en el día de hoy.
La bajada se hace muy pesada, bajamos con precaución ya que hay muchos tramos de piedras y bolos sueltos a los que hay que prestar mucha atención. A media bajada para un todoterreno y nos pregusta que a donde vamos y de donde venimos. Entablamos conversación con su conductor que se interesa por nuestra ruta y nos cuenta un poco su vida...bueno al menos aflojamos la tensión de la bajada y nos distraemos un rato.Nos desea buen camino y prosigue el suyo.
Después de muchas revueltas llegamos al angosto desfiladero, es la Foz de Escalete, un enorme tajo sobre el barranco de Forcallo que nos abre paso hacia el rio Aragón.
Ufff ...una cerveza con limón y algo de picar nos devuelve a la vida. Nos quedan poco mas de 6 kilómetros hasta el Camping de Anzánigo pero necesitábamos esta parada.
Nos despedimos de la amable dueña del Bar el Carmen y proseguimos camino.
Relajadamente pedaleamos por la A-1205 que nos conduce hasta el camping, vamos llaneando paralelos al rio Gállego y a esta hora no hay apenas circulación. Dejamos el cruce del pueblo de Anzánigo a nuestra derecha y cuando nos damos cuenta ya estamos en el camping.
El Camping de Anzánigo, no sabría como definirlo. Con aspecto de " camping motero" descuidado y destartalado, ya lo conocía de antes pues hicimos noche en la ruta el Reino de los Mallos y ya me pareció cutre ...pero en esta ocasión se supera. El trato y la poca empatía del dueño no nos gusta . como tampoco las instalaciones que por el precio ofrece ( alojamiento,cena y desayuno)
La cena, si a eso se le puede llamar cena, deja mucho que desear y cuando le comento que para el desayuno queremos salir muy temprano, me dice que el desayuno es a partir de las 9:00 h. Nos ofrece la posibilidad de a la noche, darnos algo preparado
Ese algo es un zumo y un trozo de bizcocho, lo miro como diciendo que donde vamos con esto, que vamos en bici y se queda con cara de haba. Total que le encargamos unos bocadillos para nos desmayarnos a los pocos kilómetros y con un poco de desgana accede a hacerlos ( resultado unos bocatas hechos de cualquier manera y con poca gana) ....pero pagandolos. Vaya tela..¡¡¡
Pero es el único alojamiento que existe en la zona...y a morir al palo.
Pero recomiendo modificar la posible ruta y evitar pasar por este " antro".
Nos vamos a descansar y a tratar de olvidar este sitio, que mañana tenemos que afrontar la última etapa del recorrido...eso si ya por territorio familiar.
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